La Formación Técnica Profesional: Verdadera Alternativa de Éxito
El futuro de la educación superior en Colombia está en la Formación Técnica Profesional. No es desconocida la crisis por la que hoy pasa la educación en nuestro país, debido a que las estrategias de formación no coinciden con las estrategias de desempeño, no solo por las necesidades que nuestra sociedad hoy tiene en el hacer, sino por las grandes ventajas que aporta, en la relación beneficio costo un programa Técnico profesional. En Colombia la pirámide de competencias duras esta invertida, debido a que tenemos una relación de más profesionales (el saber) que técnicos profesionales (el hacer). Llevando a que las familias deban invertir mucho más dinero en la formación de sus hijos, encontrando que, en la mayoría de los casos, no se recuperan estas inversiones, porque los profesionales deben ingresar al mercado laboral a realizar actividades técnicas, que con una menor formación y con mucha menor inversión lo hubiesen podido hacer.
Los beneficios no solo son económicos, sino de racionalidad de tiempo, de poder concretar las metas, de formarse en el hacer y de lograr definir con claridad, identificar sus competencias y así poderlas alinear de forma eficiente con los estudios que pueda emprender. En momentos como los actuales, cuando nuestros jóvenes no saben lo que realmente desean hacer, no quieren estudiar programas largos, pero además, tampoco están dispuestos a destinar mucha inversión a esas formaciones, la Educación Técnica Profesional toma gran fuerza e importancia por ser, dentro de la educación superior, la posibilidad que ofrece esas condiciones que, tanto el mercado laboral, como los jóvenes buscan.
La formación titulada es una oportunidad, es la competencia que nos permite llegar al sector público, a empresas certificadas y grandes compañías que tengan estándares de calidad implementados en sus procesos. Si en algún momento debemos demostrar que contamos con los estudios suficientes, será necesario aportar nuestros títulos. Ahí está la diferencia más importante con la formación para el desarrollo humano. Esta última conduce a una certificación que, en muchos casos, no cumple con los criterios o condiciones de calidad mínima que exige un proceso de formación y desempeño. Si la dedicación y la inversión son muy cercanas, ¿por qué no obtener un título? Es posible que pueda no resultar interesante tenerlo, pero es la puerta de ingreso a cualquier oportunidad importante en nuestras vidas. Cuando nos negamos a ello, es posible que solo concentrarnos en el trabajo, pueda llevarnos a estancarnos y no alcanzar nuestros sueños.
Por: Johny José García Tirado